Temblor esencial

Todas las personas tiene temblor, en mayor o menor medida, en unos es imperceptible y en otros es más notable. No todo temblor es debido a una Enfermedad de Parkinson, de hecho la causa más frecuente es el “Temblor esencial”. Su causa aún no es del todo conocida, pero a diferencia del Parkinson, no es degenerativa ni va acompañado de otros síntomas. Puede que haya antecedentes de temblor en la familia.

Suele manifestarse en un inicio de forma sutil, a veces tanto que solo se percatan de ello los familiares, no obstante puede progresar y hacerse más latente. Se tiende a ver en manos, piernas, tronco, lengua, mandíbula, voz y/o cabeza (como asintiendo o negando). En cada persona se manifiesta de forma diferente.

Se observa cuando la persona está ejecutando algún movimiento, sujetando algo o manteniendo una
posición concreta. El diagnóstico de este tipo de temblor lo realiza el médico en función de los síntomas y
signos observados. Se recomienda realizar al menos al inicio una analítica y vigilar la función de su glándula tiroides. También se debe evitar tomar algún medicamento que pudiera dar este efecto secundario.

Las pruebas no sirven para diagnosticar este temblor, solo se realizan en caso de que haya dudas.

En la mayor parte de los pacientes, el temblor no interfiere con su vida diaria, y por lo tanto no necesita medicación. Cuando limita o dificulta tareas importantes, el médico puede valorar en conjunto con usted el uso de medicación para intentar atenuar la intensidad del movimiento, pero no siempre logra que desaparezca el síntoma. Tomar medicación no garantiza que el temblor mejore o de saparezca, en algunas personas puede disminuir, sin embargo, en otras no. Sea paciente con el tratamiento, solo su uso prolongado puede ayudarle.

Entre los medicamentos que se usan para el temblor esencial, destacan algunos que se toman para problemas de hipertensión y de corazón, como el propranolol (Sumial®), y otros que se usaban para epilepsia, como la primidona (Mysoline®), clonazepam (Rivotril®), topiramato, zonisamida y gabapentina entre otros, en los que han demostrado un potencial beneficio en el temblor esencial.

Recomendamos continuar sus actividades con normalidad. Reducir en la medida de lo posible aquellas cosas que pudieran agravarlo como el estrés y la ansiedad. Evitar el consumo de alcohol, drogas y estimulantes como el café. Mantener una dieta variada. Realizar tareas de destreza manual y ejercicio físico de forma diaria.